~Cositas de Poly~

lunes, noviembre 13, 2006

La medicina y los zurdos

En un principio, el ser una persona diestra o zurda dependería de dos factores : la herencia y el adiestramiento o experiencia que cada niño tiene durante su maduración cerebral. En ningún caso la zurdera debe considerarse un defecto o una manía que hay que corregir. Es importante una adecuada lateralización, previo para el aprendizaje y desarrollo de la escritura y la completa madurez del lenguaje.

Según el doctor Förster, “un niño menor de un año aún no ha conseguido definir su lateralización, es ambidiestro, es decir, desarrolla con ambas manos la misma habilidad, no teniendo una preferencia de mano definida, y en muchas tareas motoras utiliza ambas manos con la misma eficiencia”.

Es entre los 2 y 4 años cuando se establece la preferencia definitiva de una mano sobre otra. Si el niño de más de 4 años aún se muestra ambidiestro, es recomendable consultar al pediatra para evaluar la posibilidad de que tenga problemas en su maduración motriz.

Sólo alrededor de los 6 años, al inicio de la enseñanza básica, se tiene certeza respecto si el niño es diestro o zurdo, porque debe optar por una mano dominante para la escritura. Puede darse también lo que se denomina ‘lateralización cruzada’, cuando por ejemplo se es diestro de mano y zurdo de ojo, o viceversa. Sin embargo, la especialización de los hemisferios cerebrales es una función que va madurando y emergiendo a medida que ocurren los cambios estructurales del sistema nervioso propios del desarrollo infantil, y la especialización de un hemisferio cerebral en tareas de control motor fino de la mano y en habilidades de lenguaje, llevará a mayores logros funcionales.